Sin ti y Contigo

Sin ti...

Mis ojos reflejaban un abismo,

mis labios pronunciaban

palabras sin sentido ni cuerpo,

mis manos se deleitaron falsamente

con un cuerpo ajeno, quedando atrapada

entre la liviandad y la lujuria,

mi mente, ideando cómo alejarme

de forma sangrienta, no escuchó

el suave coro de mi corazón.

Mis pies no caminaron con dirección propia,

siempre estuvieron guiados por pasos invisibles,

imperennes.

Mis oídos nunca se detuvieron un minuto

para escuchar las palabras sinceras

de un corazón herido y enamorado.

Mi alma no había despertado de su letargo aún.

Contigo...

Mis ojos son de cristal

y te muestran el valladar de

amor que habita en mí.

Mis labios retiene el calor de tus besos

y el sabor de tu piel.

Mis manos son capaces

de dar caricias y secar lágrimas.

Mi mente no deja de crear imágenes de un futuro

contigo, ayudada por mi razón y corazón.

Mis pies no caminan detrás ni delante de ti,

sino a un costado, para afrontar contigo

dificultades y gozar triunfos y alegrías.

Mis oídos buscan esas señales cálidas

de amor que se deleitan por el sonido de tu voz.

Mi alma por fin está consiente de que el amor

HA LLEGADO PARA QUEDARSE Y NUNCA PARTIR.

Mi ser aprehendió su libertad

para convertirla en tu libertad...